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RazonemOs! =/
Isaias 1:18
Razonar: En sentido
amplio, se entiende por razonamiento a la facultad humana que permite resolver
problemas, extraer conclusiones y aprender de manera consciente de los
hechos, estableciendo conexiones causales y lógicas necesarias entre ellos.
Razonar es algo que hacemos a diario, como el “por que no
cruzo la pista cuando viene un carro” o “por que no insulto a toda la gente con
quien me encuentre”… exacto! No lo hacemos porque razonamos las consecuencias
que pueden venir en base a nuestro “sentido comun” y a la experiencia de otras
personas.
Pero hay algunos casos en los que no es tan facil razonar, o
como diria Voltaire:”el sentido comun no es tan comun”…
“Ana: Yo por ejemplo,
odio las matemáticas porque no les entiendo ni papa, pero creo que la culpa la
tienen los maestros porque no saben enseñar lo básico, y cuando pasas a lo
difícil, sin lo básico, te haces bolas. Por eso hago la pregunta.... ¿Porque la
mayoría de la gente odia las matemáticas?
Karen: Ok, la mayoria es
porque les da pereza el pensar, razonar y prefieren todo un poco más
simple. Difiero de lo que dijiste, los maestros si enseñan bien lo basico
(bueno, en mi caso asi lo fue) pero los alumnos son los que no ponen atención
desde el principio, porque "x" o "Y" razon, no tienen
ganas, aburridos, tristes, etc etc. y al final al no entenderle quieren que se
les explique todo muy rapido y al ser tan rapido no entienden la informacion
como deberia de ser.
Por eso yo digo que
desde el principio uno como alumno hay que ponerse las pilas, estar atenttos en
clase, preguntar cuando exista alguna duda etc etc”.
El anécdota anterior refleja que el
razonar muchas veces se complica debido a la pereza, tenemos otras cosas que
hacer, queremos hacer otras cosas seria la palabra, y luego lamentamos no
haberlo tomado en serio, suele suceder con los examenes jalados en el curso de
matematica.
RAZONEMOS
“Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados
fueren como la grana, como la nieve seran emblanquecidos; si fueren rojos como
el carmesí, vendran a ser como blanca lana. Si quisieres y oyeres…”
El mensaje de Dios es muy claro, El
ha sido muy bueno con nosotros, nos ha provisto de cosas grandiosas, pero
muchisimas veces le hemos fallado y nos hemos engrandecido (1:2) hemos sido
rebeldes a su voz, y nos volvimos atrás (1.4). La pregunta de Dios es “¿Por qué
quereis ser castigados?”.
“Hastiado estoy de holocaustos y de
vana ofrenda” Dios no quiere que hagamos lo que “podamos”, el quiere que
Razonemos! Tenemos que escoger o bien la promesa de Dios de “sean
emblanquecidos” y “vendran a ser como blanca lana” o entre “cuando extendais
vuestras manos, yo escondere de vosotros mis ojos; asimismo cuando
multipliqueis la oracion, yo no oire…” (1:15).
Eso es peor que jalar en
matematicas! “Separados de mi nada podreis hacer” dice Juan. Cuando no
razonamos con Dios, nos exponemos a la infelicidad. Y a la culpa, ya no podemos
pecar tranquilos, porque ya le pertenecemos.
¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del remanente de su
heredad? No retuvo para siempre su
enojo, porque se deleita en misericordia.
El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos
nuestros pecados.
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